Roberto Cano es oriundo de Río Bueno y abogado de profesión, carrera que cursó en la Universidad de Chile, Santiago. Se manifiesta un “enamorado” de su comuna, historia y características; de hecho en 2011, quien también fuera ex Seremi de Gobierno entre los años 1990 – 1994 en Puerto Montt, publicó el libro “Río Bueno, Crónica de sus Orígenes”; un documento de gran valor que narra los orígenes y acontecimientos históricos más relevantes de dicha localidad. “Siempre me sentí atraído por estos temas. En mi casa había libros y se leía mucho. Recuerdo que mi abuelo esperaba el fin de semana que le trajeran la revista “Vea”, que era una de las pocas publicaciones que llegaban acá. De tal manera que siempre viví en ese ambiente, de mucho conocimiento”. Agrega que en la escuela desarrolló su lado humanista y a través del Derecho pudo tener una formación amplia y diversa. En la actualidad, Roberto Cano, está de vuelta en su natal Río Bueno donde ejerce como Juez de Policía local, además de integrar el directorio de la Asociación Patrimonial Cultural de la Región de Los Ríos.
– ¿Cuáles son sus impresiones sobre la Asociación Patrimonial Cultural de la Región de Los Ríos?
Esta Asociación tiene la misión fundamental del desarrollo del patrimonio cultural de la Región de Los Ríos el cual es amplio y de largo alcance, debido a todo lo existente en esta zona en esa materia. No debemos olvidar que nuestra historia se remonta a la población indígena originaria que es anterior a la llegada de los españoles. Tenemos un espacio físico que cuenta con una diversidad de población con todas sus ricas expresiones propias que hacen muy amplio el patrimonio cultural existente. La Asociación es un actor más, frente a otros que forman parte de la institucionalidad pública como el mismo Ministerio de las Cultural, las Artes y el Patrimonio, Gobierno Regional, Ministerio de Obras Públicas, Municipalidades, Corporaciones y Municipalidades. Creo que una de las bases para desarrollar un muy buen trabajo es coordinar todas esas entidades y esfuerzos en busca de las metas propuestas.
-¿Cómo se podría dar mayor visibilización al patrimonio cultural existente en Los Ríos?
Hay varias formas de visibilización. Una de ellas es la organización, como la propia Asociación Patrimonial Cultural de la Región de Los Ríos, que además tiene un carácter especial porque es formada desde el Gobierno Regional, teniendo como socio a las Municipalidades y otras entidades muy importantes. Pero también hay manifestaciones individuales y quiero comentar una que viví hace poco: hace un par de semanas tomé mi cámara y recorrí mi antiguo barrio en Río Bueno, al cual he vuelto, para tomar fotografías de casas antiguas. Pude conversar con dos personas; una que conocía y la otra que se me acercó y me manifestó su gran preocupación por la pérdida de patrimonio que se ha dado en esta comuna. Él, junto a otra persona, habían rescatado antiguos boletos de tren. Ese es un ejemplo de alguien que tiene preocupación por el patrimonio de la ciudad. También me paso recientemente, que un ciclista, se me acercó a conversar con la misma preocupación. Lo sorprendente es que personas que uno pudiera imaginar que no tienen mayor interés por el tema patrimonial, sí lo tienen. Esas situaciones me llenan de optimismo”.
-¿Qué ha significado su obra histórica sobre Río Bueno, tanto para la comunidad local como para UD.?
El libro tuvo una muy buena recepción. En el lanzamiento, que se hizo en la Plaza de Armas, vendimos casi 100 ejemplares. Yo estaba preparado para no más de 30. Se generó mucho interés no solo en la población de Río Bueno, sino que incluso en gente oriunda de esta comuna que vive en el extranjero. En la actualidad el libro está agotado, lo que me lleva a pensar en una reedición. En la parte personal me ha dado solo satisfacciones.
-Los Ríos se distingue por sus bellezas escénica, aspecto que se destaca continuamente. ¿Cree que, junto a éstas, nos falta potenciar nuestros atractivos patrimoniales?
Tenemos dos tipos de patrimonio: el natural, que es lo que se distingue de la naturaleza con su propias leyes; y el cultural, que es gracias a la intervención del hombre, entendido como género humano. Ambos son patrimonio y se complementan, son algo valioso. A veces uno ve que se habla mucho del desarrollo turístico aprovechando la gran belleza escénica que tenemos. Pero también forma parte de eso, como insumo fundamental, la historia de la zona y sus expresiones culturales; como gastronomía y arquitectura, entre otras.
El desarrollo del patrimonio cultural es un desafío permanente y hoy día estamos en mejores condiciones que en otros tiempos o años anteriores para potenciarlo.